Tenéis razón, os tengo un poco abandonados, lo siento. Anoche me propuse no acostarme sin publicar una entrada aquí, pero me acosté temprano tiritando por fiebre y con una diarrea…y es que era raro que en mes y medio, que llevo aquí, no me hubiese dado. En fin, hoy llevo todo el día entre la cama y el baño pero no quería que pasasen más días sin dar noticias de aquí. Pongo algunas fotos y las comento y otro día que esté más lucida os cuento más cosas, ¿vale?
Hay fotos que son de hace tiempo, que desastre que soy.
La salida al cine con las mayores. Eligieron una de miedo aunque es difícil elegir otra porque aquí si hay diez películas en cartelera, 8 son de miedo. Es increíble. Y a mi que no me gustan…pero fue muy divertido ir todos juntos. Después nos subimos en unas atracciones que había en la puerta. Las chicas se lo pasaron muy bien en su primera visita al cine.
Llegó el día de llevar el mueble que compré a Fertiza. Éste coche (carro como dicen aquí) es del hermano de Alex y nos lo prestó para hacer "la mudaza". Como veis aquí ni baca ni nada, un carton y al techo. No creais que es porque éste coche está para el desguace. Todos lo hacen igual. Cuando llegamos a Fretiza una rueda se salió. Literalmente, una rueda de atrás salió rodando sola y el coche con el eje en el suelo. Podría haber sido una desgracia pero nosotras ya nos habíamos bajado del coche y estábamos con los niños a unos metros. Un minuto antes esaban todos los niños alrededor del coche. Así se quedó en algo de lo que estár riéndonos durante un buen rato
Y así quedó la sala de profesores después de mis "reformas". No es gran cosa pero ya se ve de otra manera. La pintura no se podía quedar mejor porque la pared se caía. Así que cuando me cansé de pintar decidí que en la última pared...un plastico.
Aquí el mueble, con las medicinas... organizadas más o menos.
Ahora os voy a mostrar algunas fotos de Fertiza...
Pamela y Antoni suben contentos su montaña particular. La montaña que cada día van aunmentando los camiones que vienen a descargar escombros. Donde pasan horas sacando el hierro de los forjados con unos grandes martillos para venderlo después y colaborar así con la economía domestica.
Jordi y Jasmín lavandose, después de terminar de trabajar, en el pozo de agua medio limpia pero que está junto a la maloliente acequia de desagüe de todo el Callao que cruza por Fertiza, junto a la casita, antes de llegar al mar.
Cecilia y Jasmin posan, les encanta. Lo que se ve detrás son los baños. Esas "casetas"de madera sobre la acequia, son los baños que usa todo el mundo.
Ahora una imagen bonita. Mi pequeña Pamela con su perrito. Habreis visto que siempre lleva gorro. Tuvo
una tremenda infestación por hongos y se le cayó todo el pelo. Ahora lo lleva corto y aunque está preciosa, a ella no le gusta.
Cecilia buscando si hay alguna bombilla servible en un montón que han tirado por allí. Con una impresionante puesta de sol detrás.
Porque si hay algo bonito en Fertiza, además de sus niños, son los atardeceres...
Noemí ( 8 años) y Sofía (5años) van a vender su fierro.
Con Melody, Juanita, Antini, Percit y Diego en una calle de Fertiza.
Sven se fue y los niños le hicieron una fiesta de despedida.
Melody con su trabajo para el día de la madre. Aquí es el segundo domingo de Mayo y se celebra mucho en todos sitios. Hicimos unos marcos con unas fotos suyas.
Ahora pongo unas cuantas fotos de "mi casa" aquí, que algunos me habeis pedido.
Margarita, la madre de Alex y un poco la mamá de todos aquí, haciendo la comida. Las ventanas y la puerta del fondo es mi habitación.
Iris, una de las hermanas de Alex lavando ropa. Las ventanas y la puerta de la derecha son de mi habitación.
Alex y Cati (estuvo en Febrero como voluntaria y ahora se ha venido por un año para llevar el programa de apadrinamiento), en la oficina que está en la misma casa, en la cuarta planta.
Las vistas desde la oficina. En Perú ésto es algo normal, las casas son un eterno... en construcción.